PORQUE AL FINAL, DE LO QUE SE TRATA, ES DE ENCAJAR LAS PIEZAS…
Gracias a la empresa francesa D’Arpèje, que nos confió la producción de sus puzzles, disfrutamos como niños fabricando estos diseños tan bonitos.
Y como la cosa va de rompecabezas, a continuación te contamos cuáles son los beneficios de hacer puzzles, tanto para los adultos como para los más peques. Porque toda edad es adecuada para sentarse un ratito a encajar piezas. 😉
– Entrenamos la memoria:
Para encontrar la pieza que toca hay que memorizar unos colores y unas formas. Cuando se ejercita la parte del cerebro encargada de conservar esta información, es como si llevásemos al gimnasio a la parte que se ocupa de la memoria a corto plazo.
– Mejoramos el razonamiento visual-espacial:
Ejercitamos nuestro razonamiento espacial al tener que ubicar diferentes piezas dentro de un espacio más grande.
– Conseguimos un ejercicio cerebral muy completo:
Al hacer puzzles ejercitamos tanto la parte derecha como la parte izquierda del cerebro. Ambos lados tienen que comunicarse y trabajar en equipo, aumentando así la función cognitiva.
– Mejora la psicomotricidad:
Este beneficio se aplica sobre todo a los más pequeños. Al manipular las piezas y tener que encajarlas, conlleva al desarrollo psicomotriz.
– Incrementa la concentración y disminuye el estrés:
Al tener que estar enfocados en realizar una única tarea se trabaja la concentración. Y es precisamente esa concentración la que ayuda a que el cuerpo y la respiración se regulen.
Y para terminar… ¡una curiosidad! ¿Sabías que Educa cuenta con el puzzle más grande del mundo en una sola imagen? Tiene nada más y nada menos que 42.000 piezas y mide (una vez montado) 7,49 metros de largo por 1,57 metros de alto. ¡Seguro que se necesita más de una tarde para finalizarlo! 😉
En Sentinel damos vida a tus ideas: consúltanos sin compromiso. Queremos ayudarte a que todas las piezas encajen.🧩