Del story telling al story doing.
Tras casi un año de tramitación parlamentaria, la Ley de Residuos y Suelos contaminados ya ha sido aprobada.
Esta nueva norma fija los principios de una economía circular y pone el foco en romper el vínculo entre el crecimiento económico y el impacto sobre salud humana y el medio ambiente, con un claro objetivo de reducción de residuos.
¿Qué destacamos de esta nueva ley?
– Prohibición de destrucción o depósito en vertedero, de excedentes no vendidos de productos perecederos, textiles, juguetes y AEE (aparatos eléctricos y electrónicos), que deberán destinarse a reutilización o donación.
– Hostelería y restauración deben ofrecer consumo de agua no envasada de manera gratuita.
– Comercios de alimentación deberán aceptar el uso de recipientes reutilizables adecuados.
Se amplía la responsabilidad del producto, obligando a:
– Diseñar productos de forma que se reduzca su impacto ambiental y la generación de residuos.
– Aceptar devolución de productos reutilizables y la entrega de los residuos generados tras el uso.
– Asumir la gestión del residuo.
En cuanto a los plásticos de un solo uso, se proponen medidas de:
– Reducción en peso de la comercialización respecto a 2022. En 2026 deberá ser del 50% y en 2030 el 70%.
– Prohibición: bastoncillos de algodón, cubiertos, platos, pajitas, agitadores de bebidas, recipientes para alimentos y bebidas hechos de poliestireno expandido (y sus tapas) y productos con plástico oxodegradable.
– Ecodiseño: A partir del 3 de julio de 2024 solo se introducirán en el mercado los productos cuyas tapas y tapones permanezcan unidos al recipiente durante su utilización.
Algo a tener en cuenta: A partir del 1 de enero de 2023 entra en vigor un nuevo impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables: 45 céntimos por kilogramo de plástico no reciclado. El abanico de empresas a las que afecta esta nueva tasa es muy amplio.
Por otro lado, un reciente estudio de Deloitte España confirma que los consumidores confían más en las empresas que en el Gobierno, para un mayor bienestar.
Toca pasar a la acción y por suerte ya hay muchos ejemplos de compañías que están avanzando en este sentido:
– Danone ha rediseñado recientemente el envase de Danacol, eliminando la etiqueta para ahorrar 130.000 kg de plástico al año (innovación 100% made in Spain)
– En Uniliver, el 53% de sus envases de plástico ya son reutilizables, reciclables o compostables.
– Purina lanzará en breve un nuevo envase monomaterial en su gama Gourmet, diseñado para ser reciclado y resistir altas temperaturas.
En Sentinel llevamos más de 10 años ofreciendo propuestas sostenibles en las fabricaciones/manipulaciones que realizamos para nuestros clientes.
En la actualidad hemos dado un paso adelante para conseguir mayor impacto:
– Hemos realizado una autoevaluación (encuesta gratuita en https://www.bcorpspain.es/ser-bcorp).
– Una vez definido lo que podemos mejorar, estamos en el camino de crear un compromiso consistente y sumarlo a nuestro ADN…. y que no se quede solo en palabras. Somos conscientes de que no hemos de quedarnos en el story telling, hay que saltar al story doing.
– Tenemos claro que la sostenibilidad va de colaborar, de compartir conocimientos y herramientas, para abordar juntos este gran reto.
¿Hablamos?